“El proceso de diseño y de toma de decisiones es muy largo, lo que no podemos prever es la situación política del país”, explicaron entonces. Adidas se desmarcó de cualquier vinculación política. Poco después, en 2017, la polémica volvió a lo que muchos llamaron como “camiseta republicana” ya que los rombos de la parte izquierda azules y amarillos se confundían y parecían morados. El negocio de las camisetas de fútbol es una parte muy importante de este deporte.